Grado de Antropologia del Estado Español

miércoles, junio 28, 2006

Entrevista con Feliz García Lausín

En relación a la reunión que mantendremos con usted el viernes día 30 de junio a las 10:00 hs. como miembros delegados de la Plataforma por la Defensa de la Antropología y la Sociología (PDAS) nos gustaría hacerle saber los temas que quisiéramos tratar en dicha reunión:

1.- Información sobre la propuesta de renovación del catálogo de títulos universitarios enviada por la Secretaría General del Consejo de Coordinación Universitaria a los rectores de las universidades españolas en la que aparecía la Sociología y la Antropología Social como un grado conjunto (15 de marzo). Dicha información salió publicada con anterioridad en el diario El País (7 de febrero)

2.- Información sobre las propuestas actuales del nuevo equipo ministerial sobre el futuro de las titulaciones de Antropología Social y Sociología si las hubiere. En caso de no existir dichas propuestas, aclaración sobre el proceso y los actores que participarán en la definición de las nuevas titulaciones.

3.- PDAS informará a su vez del trabajo y las movilizaciones realizadas hasta el momento para la defensa de la Antropología Social y la Sociología como dos grados independientes (manifiesto fundador, entrega de firmas recogidas en Universidades de todo el Estado español, etc.)

4.- Solicitudes y propuestas

Asimismo, nos gustaría informarle de que acudiremos a la reunión las siguientes personas:

Alberto Sotillos (Estudiante de Sociología)
Breno Bringel (Estudiante de Sociología)
Vicente Gómez (Estudiante de Antropología)
María Catedra (Profesora de Antropología)
Angeles Diez (Profesora de Sociología)

lunes, junio 12, 2006

¿PUEDE DESAPARECER LA ANTROPOLOGÍA EN ESPAÑA?

1) Antecedentes: la presencia de la Antropología en la universidad española y el proceso de adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior

La presencia de la Antropología en la universidad española es relativamente reciente y, aunque ha sido progresiva, no tiene aún hoy la implantación que se da en otros países europeos y americanos. Durante la época franquista una serie de factores –entre ellos, los obstáculos ideológicos para aceptar en la universidad Ciencias Sociales de base empírica y el exilio de intelectuales- impidieron la presencia de la disciplina en las universidades españolas. En ese período l@s español@s que querían formarse en Antropología debían hacerlo en el extranjero. Tal situación empezó a cambiar en las postrimerías del franquismo: la Antropología comienza a impartirse -primero, en los 70, en forma de asignaturas aisladas; más adelante, en los 80, en forma de especialidad dentro de otras titulaciones- en unas pocas universidades españolas.

El salto cualitativo se produjo en los 90: es entonces cuando, como consecuencia del nuevo mapa de titulaciones derivado de la Ley de Reforma Universitaria, se crea el título oficial de Licenciado en Antropología Social y Cultural. En la actualidad este título, que goza de una elevada demanda, se imparte en 14 universidades españolas. El problema es que la propuesta del Ministerio de Educación y Ciencia (innegociable) fue una licenciatura de sólo Segundo Ciclo (i.e.: dos cursos académicos) y esa restricción ha tenido serias consecuencias tanto académicas como profesionales.

El proceso de creación del Espacio Europeo de Educación Superior (proceso Bolonia) parecía la ocasión para la consagración definitiva de la disciplina, tanto en la Academia como en el mapa profesional español. En España es el gobierno central –ni las universidades, ni las Comunidades Autónomas- quien decide los títulos oficiales que pueden ofrecerse en todo el territorio. De esa manera, una parte importante del proceso de adaptación al EEES lo constituye la renovación del Catálogo de Títulos Oficiales. Nuestra sorpresa fue que la previsión inicial del Ministerio era la de convertir todas las licenciaturas de Segundo Ciclo directamente en másters, lo cual, en nuestro caso, suponía eliminar de un plumazo la formación académica básica que se exige antes de la especialización. La reacción del colectivo de antropólog@s fue inmediata y, desde junio de 2003, hemos trabajado para que esa previsión no se cumpliese, sin que por el momento el grado de Antropología esté garantizado. La última propuesta del Ministerio de Educación y Ciencia fue un grado de Sociología y Antropología Social que no satisface ni a sociólog@s ni a antropólog@s, porque:

A) Aunque ambas titulaciones tienen relaciones innegables en el ámbito de las Ciencias Sociales, no es menos cierto que se trata de dos tradiciones científicas históricamente independientes y académicamente bien diferenciadas, tanto en la definición y planteamiento de los problemas que estudian, como en la metodología que aplican en sus procesos de investigación.

B) Ambas titulaciones se imparten en las mejores universidades europeas y americanas como grados independientes. No vemos razón por que en la Universidad española hubieran de fundirse de forma obligatoria para todo el territorio nacional.

C) Los procesos de institucionalización de la profesión de sociólog@ y de la de antropólog@ en la sociedad española, en ocasiones largos y difíciles dadas las fronteras con profesiones vecinas y más antiguas, deben continuar. Insistimos en que ambas profesiones son necesarias para nuestra sociedad hoy, por lo que no sería oportuno ni conveniente la confusión que supondría unificar las dos Licenciaturas actuales en un solo Grado.



2) ¿Por qué defendemos la necesidad de un Grado en Antropología en el futuro catálogo de títulos oficiales?

La posición claramente mayoritaria del colectivo de profesor@s, profesionales y estudiantes de Antropología en España, es la de exigir el establecimiento de un Grado en Antropología Social y Cultural que permita ofrecer a la vez estudios de posgrado más específicos. Y ello, en síntesis, por cuatro razones:

A- Porque la Antropología tiene estatuto de disciplina (como la Historia, la Geografía, la Sociología) y precisa, por tanto, de unos estudios fundamentales. En la nueva estructuración de las enseñanzas universitarias a que obliga la reforma Bolonia, el lugar previsto para la formación académica básica es el grado, siendo el posgrado la ubicación adecuada para la formación especializada.

B- Porque la Antropología es una disciplina con una sólida implantación en la mayoría de países europeos, donde existen estudios de grado con dicha denominación y con una larga trayectoria. Si el proyecto de creación del Espacio Europeo de Educación Superior supone la convergencia con Europa, la existencia de un Grado en Antropología en España es necesaria para poder establecer modelos de enseñanza comparables con los de otros países europeos y para garantizar el intercambio de estudiantes y de profesor@s.

C- Porque, aunque la Antropología española no ha ganado todavía todo su espacio en el mapa profesional, se trata de una disciplina con enormes posibilidades de profesionalización, puesto que es, entre las ciencias sociales, la disciplina que estudia la diversidad cultural y permite formar especialistas en campos relacionados con ella, algo particularmente necesario en el momento actual por el carácter crecientemente multicultural de nuestras sociedades.

D- Porque no hay nada en el contexto actual que aconseje suprimir esta titulación del catálogo de títulos oficiales: desde la implantación de la licenciatura en Antropología Social y Cultural en nuestro país, el número de estudiantes que la cursan se ha ido incrementando, constituyéndose en una de las licenciaturas de sólo Segundo Ciclo que cuenta con más estudiantes en España.

Por favor, si estás de acuerdo con nuestra reivindicación, firma este documento y reenvíalo antes del 30 de junio de 2006 a :

d.antropologia@uab.es

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